En la gemoterapia, los minerales son valorados por sus propiedades equilibradoras y energéticas. Cuando se trata de aliviar el dolor, ya sea físico o emocional, ciertos cristales pueden ser aliados naturales poderosos. A continuación, exploramos algunas de las piedras más recomendadas para este propósito y te explicamos cómo cuidarlas para que mantengan su energía en óptimas condiciones.
Minerales Recomendados para Aliviar el Dolor
Ámbar: El ámbar no es realmente un mineral, sino una resina fosilizada, pero se le atribuyen potentes propiedades analgésicas. Tradicionalmente, se ha utilizado para aliviar dolores de cabeza, articulares y musculares, y es conocido por su capacidad para reducir el dolor en bebés durante la dentición. Ayuda también en procesos inflamatorios.
Cuarzo Ahumado: Este cristal es ideal para absorber el dolor y las energías negativas del cuerpo. Es eficaz en el alivio del dolor de espalda y tensiones musculares. Al trabajar con el cuarzo ahumado, puedes colocar la piedra directamente sobre la zona dolorida o usarla durante meditaciones de sanación.
Lepidolita: Contiene litio, lo que le da un potente efecto calmante tanto en el dolor físico como en el emocional, sobre todo cuando el dolor está asociado con el estrés. Es perfecta para quienes sufren de migrañas o dolores relacionados con la ansiedad.
Cuarzo Rosa: Aunque este cristal es más conocido por trabajar el amor y la compasión, es igualmente útil para aliviar el dolor emocional que puede contribuir a dolencias físicas. Utilízalo cuando el dolor esté relacionado con emociones reprimidas o situaciones de estrés.
Sodalita: La sodalita ayuda a reducir dolores de cabeza y otros tipos de dolor que resultan de la tensión y el estrés. También equilibra la mente, lo que puede aliviar dolores relacionados con la fatiga mental.
Amatista: Conocida por sus propiedades calmantes, la amatista es una excelente piedra para reducir el dolor general, especialmente dolores de cabeza y malestar debido a la tensión muscular.
Malaquita: Una de las piedras más poderosas para aliviar el dolor es la malaquita, conocida por la frase "los males quita". Esta piedra verde intensa ha sido utilizada durante siglos por sus propiedades sanadoras y protectoras. Es particularmente eficaz para aliviar dolores articulares y musculares, así como para mitigar el dolor emocional profundo. La malaquita es ideal para las personas que sufren de dolencias crónicas o recurrentes, y también es útil en momentos de transformación emocional, ayudando a liberar patrones dolorosos.
Cómo Cuidar tus Piedras de Sanación
Para que tus minerales mantengan su energía curativa, es esencial cuidarlos adecuadamente. Esto incluye limpiarlos regularmente, especialmente después de usarlos para el alivio del dolor, y cargarlos para reactivar su energía. A continuación, te explico los pasos a seguir.
Limpieza de las Piedras al Llegar
Cuando recibas un nuevo mineral o cristal, es importante limpiarlo para liberar cualquier energía que haya absorbido durante su viaje hasta ti.
Método de Limpieza con Agua: Si tu piedra es resistente al agua (como el cuarzo ahumado o la amatista), puedes sumergirla en agua corriente durante unos minutos, visualizando cómo el agua se lleva cualquier energía negativa.
Método de la Sal: Coloca las piedras en un cuenco con sal marina o sal del Himalaya durante unas horas. Este método es efectivo para piedras que no se deben mojar (como el ámbar).
Sahumerio: Pasa tus cristales por el humo de incienso o hierbas sagradas como el palo santo o la salvia blanca para limpiarlos energéticamente.
Mantenimiento
Después de usar tus cristales para sanación, es importante limpiarlos, ya que habrán absorbido energías negativas o el dolor que buscabas aliviar.
Puedes repetir el mismo proceso de limpieza utilizado al recibir las piedras. El sahumerio es ideal para una limpieza rápida después de una sesión de sanación.
Déjalos sobre una drusa o tierra (solo no tierra, sin planta) para que se recarguen o sobre un plato-antena taquión.
Cómo Usar los Minerales para el Alivio
Para aprovechar al máximo el potencial de los minerales, aquí te dejo algunos consejos sobre cómo utilizarlos en tu vida diaria.
Llevarlos contigo: Puedes llevar las piedras contigo en un bolsillo o como colgante. De esta manera, estarán en contacto directo con tu energía, ayudando a aliviar el dolor y promover el bienestar.
Colocarlos sobre la zona dolorida: Si el dolor es físico, coloca el cristal directamente sobre el área afectada durante unos minutos mientras respiras profundamente y te relajas.
Meditación con cristales: Coloca las piedras alrededor de ti mientras meditas o en puntos estratégicos del cuerpo para absorber el dolor y restablecer el equilibrio energético. Por ejemplo, la amatista es excelente para colocar en la frente si sufres de dolores de cabeza.
Colocarlos debajo de la almohada: Si tienes problemas para dormir debido al dolor, coloca una amatista o un cuarzo rosa debajo de tu almohada para aliviar la tensión y promover un sueño reparador. O bajo la cama a la altura de la zona (escoge una pieza de mayor tamaño).
Conclusión
Los minerales pueden ser una herramienta natural y poderosa para aliviar el dolor, tanto físico como emocional. Recuerda que su efectividad depende en gran parte de cómo los cuides y utilices. Limpia y carga tus piedras regularmente, y úsalas de manera consciente, ya sea llevándolas contigo, meditando con ellas o colocándolas directamente sobre la zona dolorida. Recuerda que la geometerapia es una técnica complementaria y no sustituye nunca un tratamiento médico.
Precauciones al Usar Minerales
Al trabajar con minerales, es fundamental tener en cuenta algunas recomendaciones de seguridad. Por ejemplo, la malaquita debe utilizarse pulida para evitar el riesgo de toxicidad, ya que en su forma cruda puede liberar compuestos tóxicos al entrar en contacto con la piel o cuando se sumerge en agua. Además, evita usar piedras sensibles al agua, como la sodalita o el cuarzo rosa, en baños prolongados o exposiciones continuas, ya que pueden dañarse. Como regla general, es importante manejar los minerales con cuidado, limpiarlos regularmente y evitar el uso prolongado sin supervisión adecuada si tienes alguna condición de salud preexistente.
¡Prueba estas piedras y experimenta su energía curativa por ti misma! Y me cuentas, te leo en comentarios del blog.
Sabela Bernárdez, naturópata, experta en gemoterapia
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