En el contexto actual, estamos entrando en la fase de sombra pre retrógrada de Marte, que anticipa la energía intensa que Marte traerá cuando retrograde desde el 6 de diciembre de 2024 hasta el 23 de febrero de 2025. Marte, regente de la acción y el impulso, también simboliza la rabia y el conflicto, tanto a nivel personal como ancestral. En esta fase, podemos ver cómo emergen emociones reprimidas y patrones inconscientes de lucha que llevamos dentro.
Nosotros tenemos la oportunidad de liberar lo que ya no nos sirve, presión acumulada, trabajar nuestras propias memorias de conflicto y guerra en el árbol genealógico es una forma de liberar la carga energética que llevamos a nivel ancestral.
Liberando la Rabia en el Inconsciente
Además de las memorias ancestrales, este es un excelente momento para trabajar en la liberación de emociones de rabia y frustración guardadas en el inconsciente, muchas de las cuales pueden tener raíces en nuestra infancia. A veces, experiencias tempranas de impotencia o injusticia quedan almacenadas en nosotros sin darnos cuenta, y resurgen en momentos como este, cuando Marte nos impulsa a enfrentar lo reprimido. Realizar terapia en esta fase puede ser sumamente liberador y prepararnos para un nuevo ciclo más equilibrado.
Mantenernos en el Centro: El "Ojo del Huracán"
Con el ambiente propenso a la irritabilidad, resulta crucial centrarnos y encontrar nuestro "ojo del huracán". La clave en estos momentos es recordar que, aunque las circunstancias externas estén cargadas de energía, la verdadera fortaleza está en nuestro interior. Mantenernos en el centro, observando y dejando fluir las emociones sin reaccionar de manera impulsiva, nos ayuda a mantener el equilibrio, aunque alrededor haya tormentas y tensiones.
En conclusión, la sombra pre retrógrada de Marte nos ofrece la oportunidad de limpiar, sanar y mantenernos firmes en nuestro centro. Aprovechemos este periodo para trabajar conscientemente en liberar bloqueos y cargas emocionales, tanto personales como heredadas, para entrar en el próximo ciclo renovados y más conectados con nuestra paz interna.
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